Reservas naturales y deporte

Te proponemos descubrir las reservas naturales del municipio con una ruta en bici.

Comenzamos la temporada de otoño con temperaturas cálidas y un agradable clima. Un momento perfecto para visitar las reservas naturales de Marina de Cudeyo y contemplar los diferentes colores que nos ofrece el paisaje en esta estación del año. 

Te proponemos una salida en bici para disfrutar del municipio y de algunos de sus enclaves naturales más recónditos. Una ruta por el Pozón de la Yesera, La Campanuca y la Marisma de Engoa. El recorrido tiene una duración aproximada de 3 horas, ida y vuelta, y es tanto para aficionados como expertos por su baja dificultad.  

Puedes comenzar el itinerario por el Pozón de la Yesera, ubicado en Gajano. Esta localización surgió en una antigua extracción de yeso que fue abandonada y de la que afloró la parte del suelo saturada de agua, creando el pozón que tenemos hoy en día y el arroyo del Romanillo. 

La zona fue restaurada y actualmente se encuentra en proceso de recuperación ecológica. En ella encontraremos flora y fauna característica de Cantabria como, por ejemplo, sauces, fresnos, espinos, carrizos y aves rapaces, anátidas o pequeños anfibios.

Desde aquí seguiremos rumbo a la Marisma de Engoa, haciendo una parada en La Campanuca, un terreno cargado de historia. Se trata de una pequeña isla de carácter rocoso ubicada próxima a la costa, donde a mediados del siglo XX hubo una cantera que ocupó gran parte de su superficie.

Actualmente la isla se encuentra parcialmente cubierta por un bosque de encinas, lo que la proporciona gran singularidad ecológica. 

Durante la Edad Media se construyó en ella un edificio religioso y alrededor una necrópolis con tumbas en fosa que fue excavada en los años 80. Durante la excavación también se hallaron indicios de ocupaciones anteriores, posiblemente romanas. Posteriormente, durante la Guerra Civil, los vecinos de Pontejos utilizaban sus cavidades rocosas como refugio.

Y para finalizar el recorrido llegamos a la Marisma de Engoa, en Pontejos. En su origen un entrante de mar que fue separado por la construcción de un dique. El entorno fue restaurado en el año 2007 y se construyó un observatorio de aves. Aquí puedes encontrar ánades azulones, ánades frisos, garzas y fochas, entre otras. La Marisma de Engoa cuenta con abundante vegetación típica en hábitats acuáticos, como carrizo y varias especies de juncos.

En la imagen encontrarás el paso a paso del recorrido para que puedas realizar la ruta en bici y disfrutar de cada parada: